“EL DESECHAMIENTO DE LA DEMANDA AGRARIA”

INTRODUCCIÓN El objetivo de está investigación tiene como finalidad puntualizar la importancia de la reforma al artículo 27 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, por lo que hace a la materia agraria de fecha (03) tres de enero de (1992) mil novecientos noventa y dos, publicada en el Diario Oficial de la Federación el (06) seis del mismo mes y año, toda vez que significó un cambio estructural a la justicia agraria, en razón de que se elevó a rango constitucional, definiéndose en la fracción XIX de dicho precepto que el Estado dispondrá las medidas para la expedita y honesta impartición de la justicia agraria con objeto de garantizar la seguridad jurídica en la tenencia de la tierra ejidal, comunal y de la pequeña propiedad así mismo se estableció que son de jurisdicción federal, todas las cuestiones relacionadas con la tenencia de la tierra de los ejidos y comunidades, instituyendo para la administración de la justicia agraria Tribunales Agrarios dotados de autonomía y plena jurisdicción, esto es la impartición de la justicia agraria no estaría más en manos de autoridades administrativas como ocurría en nuestro país antes de las reformas de que se trata. No obstante la creación de este nuevo marco agrario, el propósito de mi trabajo va encaminado a conocer si efectivamente en la nueva ley agraria en vigor, reglamentaria del artículo 27 constitucional, otorga realmente la seguridad jurídica a los sujetos de dicha ley ordinaria, como lo son los núcleos de población ejidal o comunal, los ejidatarios y comuneros, los pequeños propietarios, a los sucesores de ejidatarios y comuneros, a los avecindados, posesionarios, y jornaleros agrícolas, esto es al momento en el que por la vía de la demanda agraria accionan la maquinaria judicial de los Tribunales Agrarios, para que estos conozcan de la afectación a sus derechos, y frente a esos planteamientos se actualiza la posibilidad del órgano jurisdiccional agrario para determinar con base en la Ley Agraria en vigor o en todo caso con la aplicación supletoria de las disposiciones de la legislación Civil Federal si la demanda que le es presentada contiene los requisitos mínimos para su admisión o en todo caso reservar su acuerdo emisorio o en última instancia el desechamiento de la misma; puntos que son desde luego la materia de este trabajo de investigación, y en cuyo desarrollo tratará de dejarse en claro cuales son las facultades o limitaciones de los Tribunales Agrarios en tratándose del desechamiento de la demanda agraria, así como las conclusiones que se propondrán sobre la necesidad en la práctica de desechar la demanda